La creación de un Código Europeo de Negocios, Comercio y Sociedades es una de las recomendaciones clave del informe “Mucho más que un mercado” de Enrico Letta, Presidente del Instituto Jacques Delors y antiguo Presidente del Consejo italiano.
Es gratificante que la recién elegida Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, haya adoptado en gran medida las propuestas del informe del Sr. Letta en el capítulo “Facilitar la actividad empresarial” de sus directrices. Ella llama a la idea del Código Económico Europeo por su nombre:
“Sobre esta base, formularemos propuestas para simplificar, consolidar y codificar la legislación con el objetivo de eliminar cualquier solapamiento o contradicción, manteniendo al mismo tiempo normas estrictas. También abordaremos el mosaico de normativas nacionales que hacen difíciles las actividades empresariales en diferentes países de la UE. Facilitaremos que los innovadores tengan éxito reduciendo los costes en caso de que no lo logren. A tal fin, propondré un nuevo estatuto jurídico a escala de la UE para ayudar a las empresas innovadoras a crecer, que adoptará la forma del llamado “28º régimen” y permitirá a las empresas beneficiarse de un conjunto de normas más sencillo y armonizado en determinados ámbitos”.
El proyecto de Código Económico Europeo, apoyado a nivel académico por la Asociación Henri Capitant y por numerosas fundaciones europeas (en España y Italia por la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad (FNF), en Alemania por la Fundación Mercator, entre otras; en Francia por la Fondation pour le droit continental, la Fondation Robert Schuman y EuropaNova), pretende eliminar la fragmentación del Derecho económico europeo.
Esta fragmentación merma la capacidad de las pequeñas y medianas empresas para desarrollarse en todo el mercado único europeo y, por tanto, afecta a la competitividad de la Unión.
En su informe, Enrico Letta demuestra que es posible realizar progresos significativos en el marco de un 28º reglamento facultativo mediante la creación de instrumentos como un estatuto único para las PYME europeas para la forma de la sociedad europea simplificada, una fianza y una garantía transfronteriza reconocida, un contrato de préstamo europeo y un contrato de seguro europeo.
Estos instrumentos ofrecen a las empresas de la UE la oportunidad de aprovechar al máximo las ventajas de la existencia del Mercado Único Europeo. Promueven la realización de la Unión del Ahorro y la Inversión (Unión de los Mercados de Capitales), que permitirá a las empresas europeas innovadoras encontrar en Europa la financiación que necesitan sin tener que recurrir al mercado estadounidense, que por el momento es más competitivo.